martes, 31 de octubre de 2017

ARROPARSE.

Alargar la soledad a lágrima viva, morir aplastada por el escombro en una nube de polvo que no desaparece. Sentarla a la mesa, solos los dos, la soledad que fuimos, la soledad que reconoce la pérdida. Un suspiro que ahoga, un cuerpo exhausto, asustado, también solo, un temblor de noche, un espanto. Alargar la soledad hasta el parto, llorarla hasta recordar la muerte. Llorar la memoria, el habla, el hambre, la sombra y su escollo. Agonizar el azul incienso de sala de espera, alargar la soledad hasta dar con tu cuerpo, chocar, explotar en tu respiración el cadáver; arroparse.

GRITAR

Gritar, desmembrar el grito, volcarlo sobre un atardecer de sangre, sobre un dolor, vaciar la garganta que se ahoga, sobre lo que fuimos, sobre lo que queda. Darse un festín de gritos, deseos y noches; recorrer plazas y tabernas buscando la sombra de un clamor.  Verter la palabra, su origen, rasgar su sonido aceptando la división.  Dejar al grito explicarse que, en la cueva, se haga eco y reverbere; buscar su hambre. Arrojar la voz sobre el lecho seco de los ríos en retirada;  filtrar su corriente en la mirada sin bajar los párpados, como si fuese de justicia reposarlo en los oídos del mundo tajando el crepúsculo y el alba; amarlo.

lunes, 30 de octubre de 2017

No habrá redención

No habrá redención, y lo sabes; agonizarás tus cárceles y alambradas, desplomarás tus fronteras sobre un horizonte pardo; arena y humo aullando en la misma cavidad de la herida. No habrá muros para contener la barbarie, los orates abandonarán tus manicomios; te encontrarán. No habrá gloria. No quiero ser raíz en tu boca, turbia, mansa, aterrada, no quiero ser fruto ni crecida, no seré manantial de tu negra carne. El vicio será tu esclavitud, pudrirá tu vieja y mal oliente entraña. Como sapo despanzurrado que eres, agonizarás lentamente sobre tu propia noche. Florecerá sobre tu cadáver la simiente que será enterrada para nuestra salvación. Perecerá contigo por los siglos de los siglos; no habrá redención, y lo sabes.

Silencio.


Hay algo primitivo en este amor, un sabor a cueva, de origen, fuertemente anclado en el vientre como una resurrección, un olor intenso de guarida, casi humano, una expiación, algo brutal sin rastro; nada cambia de golpe, todo está aquí.  Todo está aquí, desde siempre, sin elección. Alguien escribió, aquí, en mi vientre; alguien lo escribió aquí, en mi carencia, en el ayuno de mi piel, en la carne hecha cicatriz. En la noche afilada, como aguja de escarcha, se enreda a mis pestañas blandiendo un lodo denso, rotundo de estrellas feroces.

domingo, 29 de octubre de 2017

Murmullo

Hay un murmullo de ocaso en tus brotes, un aleteo rápido de crecida, un alargarse sin raíces, una extensión de agua sin frontera, un cascar de planta fortuito. Entraste en mi arropado por un brillo de tormenta veraniega, por un estruendo de chaparrón sin huida, por un sueño de verdes renuevos. Hay un surco de tierra en mi garganta haciendo agujero y mella en mi aleteo, un instante de tacto dolorido, el calibre exacto de mi herida; fuiste en mi vientre y en mi pecho cicatriz de aurora.



Escalofrío

Mientras palpo el escalofrío desmenuzo la mirada legañosa, los márgenes fríos, el paso atascado de juncos secos con sus yemas blanquecinas, el llanto de mi vagina, la intensidad de rojo en los pezones, la belleza del abandono; sin perder de vista el hambre en los huecos, en los intersticios de la ausencia.

sábado, 28 de octubre de 2017

Un pestañeo

En el tiempo de un pestañeo puede borrarse todo lo que contiene la memoria humana. (Joyce Carol Oates)

Luna crecida.

Luna crecida hacia fuera, hacia los vértices que, aristada, despunta. Luna recién nacida, rotunda como el mundo, circular, sin salida.

Cavidad de boca


Veo el horizonte del mundo en tus labios dibujando una línea que rompe abrupta; un vórtice, un desfiladero sobre el vientre. Abrazada a la negra loma de tus pupilas me desgajo; virutas de cristal opaco donde mi voluntad sangra. En la cavidad de la boca un buitre ha clavado sus garras, un alfiler en la lengua justo donde la herida se hace cicatriz, símbolo, frontera, donde la ruta se hace peregrinación y la esperanza mata.
Cavidad de boca honda y sensual, labios rojos, un alfiler en la lengua, un fragmento de ti en la garganta, soy toda carne.