Un amor y su mordida
no se puede dejar de sentir su huella
poblada de ladridos y aleteos sordos
dormida en sueños
un templo difícil de sostener
un miedo sobre otro miedo
un intercambio de huidas
una cerbatana de fango
una ejecución pensada para demorarse.
Y ese aire arrastrado
y ese aire de humo de ceniza de lenta respiración anhelante
y ese aire detenido
un solo registro batiendo un oleaje de pájaro ahorcado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario